¿Qué son los terremotos?

Publicado en por vivirenelparaiso

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por Graciela Vera

También llamados sismos, seísmos o simplemente temblores de tierra, los terremotos son sacudidas de la corteza terrestre producidas por los desplazamientos de las placas tectónicas y el choque entre sí.

 

¿Porqué se producen los terremotos?

 

Los movimientos sísmicos se originan cuando las capas de la Tierra se desplazan y colisionan.  Las capas terrestres se mueven buscando el equilibrio después de haber sido desplazadas por actividades tectónicas o volcánicas.

 

No son éstas las únicas causas de los terremotos pero sí las principales y las que provocan movimientos más severos.

 

Muchas de estas causas menores producen cantidad de microsismos que no llegan en algunos casos a ser detectados por la percepción humana, y su existencia sólo se conoce por los rastros dejados en los sismógrafos.

 

Terremotos tectónicos

 

En el concepto de la tectónica de placas la corteza de la tierra se forma por al menos una docena de placas rígidas en continuo movimiento sobre una capa de roca caliente y flexible que se conoce como astenosfera.

 

Cuando dos de las placas rígidas chocan entre sí o se superponen para luego volver a ubicarse, se produce un movimiento brusco de la corteza terrestre: el terremoto, que según la fuerza del choque tendrá diferentes repercusiones a nivel de superficie.

 

La escala de Richter

 

Los sismólogos han  establecido dos escalas para describir en forma cuantitativa la potencia de los movimientos sísmicos.

 

La Escala de Mercalli, más descriptiva pero menos utilizada y la Escala de Richter, la más conocida en cuanto a información.

 

En la Escala de Richter hay un código de numeración que precisa la fuerza del terremoto:

2.5 – En general no sentido por las personas, pero sí registrado en los sismógrafos.

3.5 – Sentido por muchas personas.

4.5 – Puede llegar a provocar daños locales menores.

6.0 – Es ya considerado un terremoto destructivo.

7.0 – Terremoto de importancia.

8.0 y más – Grandes terremotos, muy destructivos.

 

 

Riesgos reales

 

En el planeta se registra un promedio de 800.000 terremotos al año. De éstos, tan sólo una décima parte conlleva consecuencias graves.

 

Aún se considera como el sismo más devastador, el que en 1556 dC provocó en Shaanxi (China) la muerte de 830.000 personas.

 

Los sismógrafos han registrado, desde que existen sus registros, como los terremotos de mayor magnitud el de Chile del 22 de mayo de 1960, que alcanzó una magnitud 9,5;  el de Alaska del 28 de marzo de 1964 que llegó a 9,2 y el del 26 de diciembre del 2004 en Indonesia que tuvo una magnitud de 9,1.

 

Más que su magnitud, la destrucción es provocada por la zona dónde se registran. Cuando lo hacen en áreas densamente pobladas, la devastación es mayor.

 

Efectos colaterales: tsunamis

 

Los tsunamis son grandes olas que tienen su origen en el movimiento brusco de las placas del lecho oceánico.

 

La ola de un tsunami se rige por el principio de la hidrodinámica, o sea que relaciona velocidad de la columna de agua con la raíz cuadrada de la profundidad del punto del mar donde se produjo el fenómeno.

 

En un tsunami, el agua del mar ejerce como freno de la parte inferior de la columna de agua, pero la parte superior de la ola sigue empujando y creciendo hasta llegar a la costa, ya con una fuerza tremendamente devastadora.

 

Predicción de terremotos

 

En las últimas décadas se ha dado un cierto éxito en la investigación sobre la predicción de dónde y cuándo se producirían los terremotos.

 

En 1975 los sismólogos chinos pudieron predecir el sismo de 7,3º de magnitud que destruyó el 90% de los edificios de Haicheng,  pudiendo evacuar a tiempo a 90.000 personas.

 

Los métodos de predicción son muchos. En el caso de Haicheng fueron una sucesión de temblores menores, precursores desde 5 años antes del gran sismo.

 

En otros casos  las pistas se basan en la inclinación o pandeo de las superficies de tierra, cambios del campo magnético terrestre, niveles de agua en los pozos o incluso en el comportamiento de los animales.

 

Otra pista, de las más nuevas a estudio, se basa en la medida del cambio de las tensiones sobre la corteza terrestre.

 

A pesar de todo, la predicción no siempre se puede realizar ni siempre es correcta.

 

G.V. 

Etiquetado en Seguridad y alarma

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